Wednesday, May 23, 2007

Esta noche...



Te ofrezco mi semen tibio,
dame tu sexo ardiente.
Te ofrezco mi lengua de acero,
dame tus senos, la inquietud de tus manos.
Muerde mi glande,
yo devoraré tus labios;
rodéame con tus piernas,
yo pondré mi carne en tu carne.


Pero sobre todo, llegado el momento:
no rompas demasiado rápido este abrazo,
espera un poco antes de tenderme la mano.
Quizá así olvidemos, por un momento,
lo solos que estamos.

23 comments:

La machincuepa said...

Ay queridito mío, así no va a brillar en sociedad, ya le dije.
Besos dear!

Anonymous said...

Es que yo pensé que me quería... No es justo, no es justo...

Beso Miranda.

El yuste said...

uff, como que de repente necesito una soda bien fría pa la calor...

Quien es Miranda Priestly?

El yuste said...

ah sí! llego acá por los links del Fénix, mi bró!
saludos!

LettyLup said...

Sin duda esta entrada ha sido una de las que mas he disfrutado.

Me quede pensando que tan bueno o malo será el olvidar tu soledad en los brazos de alguien que posiblemente se encuentre en la misma situación, al final no se sentirá mas soledad?

Beso

Anonymous said...

Yuste: bienvenido por acá. El calor puede obedecer a un par de motivos: 1) La escala previa por los dominios del buen Fénix. 2)La presencia en el Black Blog de mi querida Miranda, que además de ser mi generosa asesora de sociales, es el mismísimo chamuco enfundado en un Prada... Salud!

Letty: pos sí querida, la soledad presenta propiedades aditivas. Beso para vos.

Anonymous said...

A qué barbaro Dr., esa Soledad lo tiene desatado... jejejeje
Un abrazo del maestro de la maldad

pk said...

sin duda, mi buen ícaro, el erotismo es una vía para salir, abandonarse de uno mismo (mi carne en tu carne, groarr).

qué rico poema.

abrazo

Anonymous said...

Justo hace unos días una amiga me decía algo muy similar a lo que tu comentas PK. Quizá sea que nos aleja de las complicaciones de la sobreracionalización y nos devuelve a las más básicas de nuestras emociones. Claro que siempre podremos buscarle tres pies al gato y aún así ir complicando las cosas. Ni pex.

Abrazo.

Anonymous said...

ajá, y qué dijiste carnal "ora ya me eché un pensamiento bien original". ñeeee

El mito del buen salvaje lo inventé yo! Me cachis!!

Anonymous said...

Mi querido JuanJo: tiene razón, usté jué primero. En realidad releyendo lo que dije, me viene a la cabeza que esa disminución de la complejidad por la apelación a lo básico, se compensa con el aumento en la intensidad de los conflictos. Ñe!!! Bien decís...

Salud.

lehna said...

woooow

Bueno, simplemente me encantó Icarito. El encuentro erótico a veces puede ser como la copa de vino, para olvidar, pa olvidarse hasta del solitario ser que se es y de todo cuanto a uno lo define.

Un abrazooo!!!

Anonymous said...

Y también es crea dependencia cañona, mi querida Lehna, además de alguna cruda ocasional...

Abrazo querida.

LettyLup said...

Otra vez yo, regresando a leer estas líneas que siguen dando vueltas en mi cabeza.

El erotismo como via para olvidar la soledad.

lehna said...

Pues si, supongo que ninguna adicción genera sólo placer... por desgracia

pk said...

no, lettylup, el erotismo para trascenderte, que no es igual (pues solo/a segurás).

e ícaro y lehna: qué jodida puede ser la cruda del exceso de sexo.

abrazo

LettyLup said...

pk deja ordeno esa idea de erotismo para trascender. Es un buen punto

Luis David said...
This comment has been removed by the author.
Luis David said...

Y cuando el silencio se llena de olvidos... solo el erotismo nos rescata, buen Icaro.

Anonymous said...

Hoy en día, a un orden cuantitativo funcional, cuyo mecanismo ignora los ritmos profundos de la vida, se opone el desorden del instinto, el frenesí sexual.

No nos queda más que nuestro cuerpo, parece, para salir de la abstracción de la soledad. Y, aún así, la tensión erótica y su eliminación son solamente una caricatura de la muerte necesaria para que el otro exista.

Cada uno se queda en su propia soledad. La sed de absoluto hace que se espere todo durante un momento, conscientemente o no, de un ser precario que también necesitaría ser salvado, y antes o después se le ignora, se le hiere, se le destruye, Tristán o don Juan.

Esto desplaza la búsqueda de absoluto hacia el placer mismo, la búsqueda de lo sagrado hacia la profanación. He aquí de nuevo a Narciso ante el espejo, el tiempo oscurece el espejo, hay que cambiarlo para hacerse adorar de nuevo y a medida que todo se vuelve profano, la profanación tiene que avivarse en las transgresiones.

Al final de las “liberaciones” surgen gestos de verdugo o de esclavo. Georges Bataille celebra en la relación entre víctima y verdugo [Marqués De Sade] la relación erótica suprema, quizás el éxtasis: cuando no se sabe morir para que el otro sea, se hace morir al otro para sentirse ser.»

pk said...

has sido tagueado para hacer un ubi sunt

saludos

Anonymous said...

puras jaladas!

Anonymous said...

Bueno, disculpas por tener tan olvidado el changarro.

Luis David, qué gusto verte por acá amigo!!! Me dejas pensando en la posibilidad contraria, a saber: que al tomar al erotismo como salvación,terminemos más hundidos en el olvido y la tristeza...

PK: tas bien denso!!! La verdad me da miedito entrarle al ubi sunt, pero bueno, ya trabajaré en el asunto. Nomás tranquilo, que soy lento...


Don Olivier: tiene usté razón en que cada uno se queja de su propia soledad. Y agregaría: cada uno se queja de su propia soledad como si esta fuese única o de un carácter que la hace especial o de mayor importancia que las otras múltiples soledades. Lo cual es cierto para quien la experimenta, claro, pero al mismo tiempo le resta un poco de interés al asunto.

Saludos a tod@s.